Feliz Navidad, después de todo

Yo creo que si no fuera por las ganas de matarme y los planes que tuve durante toda la semana de cómo llevarlo a cabo (porque planear matarse lleva muchos preparativos), y el estrés de estar estudiando para exámenes que solamente me iban a conseguir un diploma que no me servía para nada, y con todas las ganas de dejar todo al carajo, aunque fuera la última semana, porque NO SERVÍA PARA NADA... eso sumado a la consecuencia de una terrible contractura de cuello y dolor de cabeza palpitante, y la visita a mi casa para Navidad, con la consecuente persecusión de familiares varios para que una asista a su pelotudísima Noche Buena, y qué vas a tomar y qué vas a comer, y si venís a qué hora venis? y cuándo sabes si venís o no? Etc etc. Agregando, por supuesto, las ganas de morir que me da despertarme dolorosamente todos los días en esta casa que es el Día de la Marmota por lo cual me tienen las bolas tácitas inflamadísimas, además del hecho de que me tratan como si tuviera 14 años.

Bueno, yo creo que si no fuera por todo eso, el otro día no hubiera terminado comiendo cucumelo en el parque de la casa de un amigo, donde hicimos una fogatita y nos tiramos a mirar el cielo. Y aunque el hongo no pegó un carajo, porque en serio, no hizo ningún efecto más que relajarnos igual que un porro, valió la pena, porque por primera vez vimos OVNIS. Vimos luces que se movían inexplicablemente por el cielo, y flashes de luz también. Estábamos hablando y de repente veíamos algo y gritábamos al unísono: uuUUUUU!!!!!!!! vissssste esooo boloooooooooo??. Fue lo más, y para mí, una confirmación de que todo en lo que empecé a creer hace un par de años, es real. Lo cual es bastante copado. Los hijos de puta no me dejan morir, me tienen que seguir manijeando parece.

Y si no fuera porque tuve una pelea horrenda para no ir a cenar por la Noche Fea, no me hubiera estresado tanto por las visitas familiares deprimentes, y hoy no hubiera decidido ir a mi propio patio a mirar las estrellas (fumando uno).

Entonces agarré, me cambié, me abrigué, y me llevé un cuaderno, una lapicera, la cámara de fotos por si quería flashear sacando fotos, el celular con auriculares porque tenía ganas de seguir escuchando Deftones, y el faso y el magiclick, porque otra vez el duende del orto me robó el encendedor. Fui a sacar la reposera, que estaba enganchada con una silla, por lo tanto hice un re quilombo para sacarla, pero me chupó un huevo. Fui a mear, porque siempre tengo ganas de mear, y si volvía a mear desde el patio, me iba a dar paja volver porque hacía frío. Me senté afuera, prendí el porro y miré. Hoy la luna está al lado de Júpiter. Empecé a mirar y me encantó estar ahí, y dije, lo tengo que hacer más seguido. ¿Cómo nunca lo hice? Y empecé a crear mis primeros encuentros. Después me paranoiquié un toque, con los bichos, y me reí de mí, y vino un gato, me vio y se asustó. ¿Por qué son tan cagones los gatos? Y seguí flasheando, y en un punto estaba así mirando las estrellas, y me dí cuenta que parecía el meme y me cagué de risa.

Después alguien se levantó para ir al baño y me chupó un huevo. Me imaginé la conversación: -Vos estas fumando porro?.-Sí, ¿por?. -Ah, esta sí que no me la esperaba, fumando porro en el fondo. -¿Viste? Vos crees que me conoces, pero no tenés idea.-
Y salía así re winner yo. 
Después me dio miedo, porque viste que a la noche hay como mucho silencio pero mucho ruido que no sabes qué onda, qué es. Y es medio tétrico porque no tenía fogatita como el otro día, y estaba  sola, y ble, demasiadas pelis de terror. Entonces agarré fui prendí la luz, porque algo en el piso había seguro, y no iba a verlo con la luz apagada. Levanté todo lo que había tirado, llevé la silla, volví a ver si había quedado algo, no quedó nada, cerré la puerta, y después tuve una lucha con la reposera, porque obvio que los  auriculares me la habian trolleado y estaban enredados en el apoyabrazos y fue un quilombo sacarlos. Volví a hacer ruido. Saqué todo lo que había en la reposera, celular, lapicera, cuaderno, cámara, magiclick, y unos fósforos que había llevado antes porque me había olvidado que tenía el magiclick, y los puse en la mesa. Después dije, ya que subo, me llevo morfi. ¿Hoy cené? No cené. ¿Cené? Ah, me comí un sánguche, porque tenía un hambre medio histérico. Ya fffffffue, me agarro otro cacho de arrollado, esto no se repite hasta el año que viene. Me corté un cacho y después me serví jugo, porque no me voy a llevar comida sin jugo,  y me di cuenta que

[NOTA: En el momento de escribir esto, me flashie el pasto prendido fuego, porque tiré la tuquita, y me fui a mirar por la ventana que esté todo en orden JAJAJAAJ]

                                                                                y me di cuenta que no iba a poder llevar todas las cosas, más el plato, más el vaso, menos sin tener bolsillos, porque tenía calzas. Pero tenía la camperita, y la camperita tenía bolsillos, y dije, SÍ SE PUEDE, SÍ SE PUEDE. Entonces agarré, me puse el celu en un bolsillo, la cámara en otro, el cuaderno me lo puse adentro de la campera, y la lapicera en el espiral del cuaderno, y agarré el plato con una mano y el vaso con el otro, y con un dedo apagué la luz, y emprendí el camino en la oscuridad, desde la cocina, pasando por un pasillo, subiendo una escalera, pasando por otro pasillo re deforme, y entrando a mi pieza, todo en completa oscuridad haciendo malabarismos con las dos manos ocupadas.

Y después dije, naaaaaaaa, acabo de fumar, ¿cómo voy a comer ahora? Entonces dije, voy a escribir toda esta huevada porque me encantó la experiencia, fue otra de mis aventurillas, me hace acordar a cuando era chiquitita, ya hacía de estas cosas, de pura rebeldía tonta contra mis padres, y supongo que es lo único que no dejé de hacer ni voy a dejar de hacer nunca. FuCK U.

Y esta hermosísima canción que me dí cuenta que me iba como anillo al dedo en este momento, va dedicada a ellaaaaa, ella se gana todo mi odio, todo todo, cuando la veo es como que amo al resto del mundo, es como un asqueroso agujero negro de odio.




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