Me están pelotudeando.

Salí al patio a mirar las estrellas, a putear un toque a los aliens, a Dios, o al director de la matrix o lo que mierda sea. Porque estoy podrida de estar atrapada acá. Truman podía ser feliz, hasta que se dio cuenta, y yo desde que me di cuenta ya no me puedo autoengañar todo el tiempo. Quiero salir. Quiero irme a casa. Y bueno, una estrella apareció y desapareció en mi fucking cara, como diciendo, "mirá, acá estamos, por si seguís sin creernos". O "mirá, acá estamos, pelotudeando por ahí, pero no pensamos ayudarte". Llegado este punto pienso que la vida es un gran chiste. Ya no sé qué creo, ya no sé quién soy, solamente sé que quiero irme, quiero irme a casa, sea lo que sea eso. Porque está claro que una casa debería sentirse como una casa, no? Debería sentirme segura, feliz, a gusto. Pero no.
No importa cuántas cosas consiga, cuántas experiencias tenga, si solamente, lo que más deseo, es volver a ese lugar que no recuerdo, pero que extraño como un alma sedienta de paz.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

yo también te quiero